Es complicado comentar un disco
de Dream Theater cuando hay tanta historia tras el nombre de este quinteto, cuando
el disco a comentar sale después de uno de los más grandes cambios que han ocurrido recientemente en la alineación
de los neoyorkinos y sobre todo al ser un fan de ellos hace ya bastantes años.
Es
por ello que no puedo partir sin decir que esta es la primera producción donde
el nuevo baterista de la banda, Mike Mangini, participa activamente en la
composición tras la salida del legendario Mike Portnoy, cofundador de la alguna
vez llamada Majesty. Sobre los cambios en el sonido de la batería ya entraré en
detalles, por ahora no hagamos esperar más la revisión de las canciones.
El
disco inicia con un instrumental de tintes épicos, muy al estilo de lo alguna
vez hecho por sus compatriotas Symphony X o por qué no decirlo, casi sonando
como una intro de un disco de Rhapsody o de ese espectro de bandas de
power/epic metal. Hablo de False
Awekening Suite, algo hasta ahora nunca hecho por DT pero que de todas
formas suena bastante bien, destacando los arreglos en los teclados y
sintetizadores de la mano de Jordan Rudess. La canción se divide en 3 partes
aunque en realidad es tan corta que no sé cuál fue el objetivo de haber hecho
eso.
Seguimos
con el primer single del disco salido hace ya un par de semanas, The Enemy Inside. Aquí empiezo a hacer
mi verdadero análisis. Primero que todo decir que no es la mejor canción creada
por la banda (ni por si acaso), más bien está en la línea de lo hecho por ellos
en sus últimos 4 discos, discos que no han sido muy de mi agrado. Guitarras
afiladas con mucha distorsión, baterías agresivas y algunos pasajes melódicos
para amenizar la cosa, sonidos que muchas veces resultan en recursos baratos o
clichés para hacer funcionar una canción. Más allá de lo antes dicho destaco el
sonido que logran cuando inician las líneas de James LaBrie, sobre todo en lo
que concierne a la guitarra que nos presenta unos riffs barridos que recuerdan
a su primer disco (WDADU) o a las grandes bandas norteamericanas del metal
progresivo de los 80’ y 90’ como Queensryche o Fates Warning, con una batería y
un bajo dedicados a marcar los tiempos… no se, me trae algo de nostalgia. En
cuanto a solos está relativamente bien, Rudess y Petrucci suenan inteligentes
pero pese a ello no me terminan de convencer, algunos de los efectos usados por
Rudess no me agradan para nada. El coro tampoco brilla mucho que digamos, en
fin, es una canción más que no pasará a la historia.
Luego
seguimos con The Looking Glass, para
mí una de las mejores de todo el disco. Un acierto total porque es de esas
canciones que le hacía falta a DT, un progrock con tintes poperos que nos
recuerda al Rush de finales de los 80’ (una de mis bandas favoritas). LaBrie
suena muy bien, maneja a la perfección los cambios de fuerza en cada parte,
desde su voz más agresiva a esas partes susurradas que hasta el día de hoy le
quedan geniales. Aprovecho de decir que
a lo largo del disco LaBrie anda bastante bien, no lo siento tan chillón como
en las entregas más recientes, al parecer por fin se dieron cuenta que las
canciones se deben adaptar a la forma actual en que un vocalista canta y no a
como cantaba hace 20 años. Un poco después de la mitad de la canción aparece un
solo de guitarra con un bajo de sonido sucio lo que me gusta mucho, por fin se
le vuelve a dar algo de protagonismo a Myung (aunque a lo largo del disco sus
líneas no sean muy elaboradas como antaño), la guitarra de Petrucci por su
parte muy inspirada con un solo emocional, no como esas basuras de solos que
estaba haciendo en el último tiempo a una velocidad supersónica pero que
parecían hechos por una máquina.
Continúa
un nuevo instrumental que lleva por nombre Enigma
Machine, canción de inicio muy potente con guitarras que me recuerdan
vagamente a Megadeth. Es interesante que aparezcan 2 canciones instrumentales
en un disco de DT cuando habían hecho falta en la mayoría de sus producciones
nuevas. No es una canción de un virtuosismo excelso pero de todas formas está
bien, me agrada sobre todo el trabajo de los teclados con solos de Rudess que
de seguro sonarán muy bien en vivo. Un punto bajo que tiene es que presenta
cortes y cambios de ritmo muy drásticos que no fueron unidos de la mejor forma
quitándole algo de continuidad a la canción.
Aprovecho
esta instancia instrumental para comentar la llegada de Mangini. Es claro que
Portnoy era parte clave del sonido, de la imagen y de todo el concepto que
envolvía a DT por lo que su salida dejó un hoyo difícil de tapar. No voy a
entrar en comentarios sobre las peleas que pudieron haber existido dentro de la
banda para que Portnoy decidiera salir, sólo decir que a mi parecer la idea del
batero de darse un descanso le hubiera hecho bien a toda la banda para tomar
nuevos aires y que me parece muy soberbia la postura de DT de no dejar regresar
a Portnoy cuando él realmente quiso volver… en fin, cosas de la música.
En
lo que concierne a Mangini, me trae sensaciones contradictorias. Por una parte
su presencia en el nuevo disco se nota pues claramente el sonido de la batería
y por tanto de las canciones cambió, poco, pero cambió. Hay partes en que se
agradece un montón este nuevo aporte pero en general la batería no brilla
mucho, no hay prácticamente ninguna canción donde su sonido sea preponderante,
sólo en algunas secciones donde le da más peso “metalero” a las canciones y en
pequeeeeños tramos como en Enigma Machine en que tiene un solo de unos 4
segundos que tampoco es para aplaudirlo de pie. Lo que más me molesta del
batero se centra en 2 cosas, primero sus pasadas por los timbales que definitivamente
no me gustan y segundo el sonido de la caja que sencillamente me da progeria.
Qué mal afinada quedó, parece que el parche estuviera totalmente suelto o
hubiera provenido de un MIDI, MUY MAL.
The Bigger Picture
es de esos midtempo/balada que ya ha hecho DT en varias ocasiones y que busca
llegar a través de la emocionalidad. En general es una canción disfrutable,
tiene partes muy bonitas pero no me logra convencer tampoco, quizá es demasiado
larga y las partes más intensas se diluyen. Un buen intento pero se queda en la
media.
Un
inicio muy interesante nos presenta a Behind
The Veil (para quien sea más fan de la banda se habrá dado cuenta que durante
el disco se usan varios sonidos que nos recuerdan discos anteriores, este
inicio no es la excepción) con un tono medio místico que da paso a un riff
potente bastante bueno pero que tristemente es sucedido por otro que lo opaca,
un riff estilo Metallica muy trillado últimamente por Petrucci que acompaña a
un LaBrie agresivo que debe ser de sus partes más bajas dentro del disco.
Siento que el vocalista podría haber dado mucho más de si porque sé que tiene
ese potencial, sin embargo recurre a una voz copia de Mustaine de “pseudo malo”
con mucha distorsión lo que no ayuda para nada. Por suerte eso dura poco y
luego aparece un coro seguido de estrofas bastante mejores. En líneas generales
es una canción que me gusta, con una estructura más simple de coros y estrofas
y un solo final muy bien logrado tanto en teclados como en guitarras.
Volvemos
a los sonidos tipo Rush (muy Rush) al inicio de Surrender To Reason para luego dar paso a una guitarra acústica
(Sí, aunque usted no lo crea) y a un órgano Hammond que encaja muy bien. Lo que
sigue son múltiples cambios de ritmo y tono dentro de la canción con coros
eclesiásticos y todo. Termina con un coro que engancha mucho, segundas voces
agradables y partes en que el bajo vuelve a resaltar. Pese al desparramo de ideas
que pudiera llegar a presentar esto, la canción logra concretar un buen
concepto. Siento que esta canción tiene influencias muy variadas y que logran
ser mezcladas y enfocadas de buena forma, me suena a Rush, a Deep Purple, a
Riverside y a Black Sabbath, todo junto. Para mí otro de los puntos altos del
disco.
Como
penúltima canción aparece Along For The
Ride, segundo adelanto que nos había presentado DT. Es una balada muy
bonita tanto musical como líricamente. En realidad no tengo mucho que
criticarle, sólo el efecto usado por Rudess en el solo que no pega para nada,
en este caso una muy mala elección. Como decía, no es una canción perfecta pero
suena bien y está por sobre la media.
Terminamos
el disco de la mejor forma posible (y me alegra mucho escribir eso). Con una
canción de más de 20 minutos como ya ha venido haciendo DT en varias ocasiones
como en Octavarium o en The Count Of Tuscany. Hablo de Illumination Theory, canción dividida en 5 partes (I. Paradoxe De La Lumière Noire; II. Live, Die, Kill; III. The Embracing Circle; IV. The Pursuit Of Truth; V.
Surrender, Trust & Passion).
Me
llama la atención como en un inicio es muy similar a lo escrito alguna vez por
Portnoy en su saga de canciones donde hablaba de su paso por la adicción al
alcohol y cómo logró superarla. Dejando de lado esta curiosidad la canción está
compuesta de partes bien definidas y diferentes entre sí. Así tenemos una parte
interpretada íntegramente por un conjunto de cuerdas muy bella, realmente
agradezco la inclusión de ella dentro del disco. Lo único que le hubiera
cambiado habría sido poner un violín mayor que resaltara y que en las partes
dramáticas agregara un poco más de vibrato para hacernos llorar como niñitas
c:. Luego aparece una parte genial, con el bajo como protagonista, no muy
técnico pero dándole un toque más de “grupo musical” a esta máquina que de
repente parece que fuera más una de suma de sus partes que un todo. Voces
inspiradas con aspecto al Megadeth de sus mejores tiempos son los que sigue, para
luego dar paso a una sección instrumental magnífica que me recuerda a algunas
bandas de jazz metal que suelo escuchar. Pasando la mitad de la canción aparece
un juego de solos de guitarras y teclados muy bien logrado que desemboca en
unos versos muy emocionales (algo así como lo hecho en The Spirit Carries
On) y finalmente en una pequeña sección
de piano que conmueve y muestra una de las mejores parte de DT, esa que no
necesita de solos explosivos sino de acordes íntimos que destilen belleza.
Y
eso fue el disco homónimo de Dream Theater, una placa ambiciosa desde un inicio
por el solo hecho de llamarse Dream Theater y tener una portada que muestra el
símbolo de la banda en plateado y de fondo un planeta Tierra con el sol
asomándose. Quizá es una indirecta hacia Portnoy, espero que no sea así. De
todas formas creo que es el mejor de los últimos 4 discos de la banda específicamente
porque suena diferente y se atreve (un poco) a navegar por nuevos mares. No
creo que sea el disco definitivo de la banda ya que en sus inicios con menos
recursos crearon piezas mucho mejores (con el gran aporte de Moore que se les
fue precozmente). Esperemos que el futuro traiga buenas cosas de la mano de
estos gringos.
Tracklist:
1. FALSE AWAKENING SUITE
i. Sleep Paralysis
ii. Night Terrors
iii. Lucid Dream
2. THE ENEMY INSIDE
3. THE LOOKING GLASS
4. ENIGMA MACHINE
5. THE BIGGER PICTURE
6. BEHIND THE VEIL
7. SURRENDER TO REASON
8. ALONG FOR THE RIDE
9. ILLUMINATION THEORY
i. Paradoxe de la Lumière Noire
ii. Live, Die, Kill
iii. The Embracing Circle
iv. The Pursuit of Truth
v. Surrender, Trust & Passion